A pesar de la caída del precio de la soja en el mercado de Chicago, los números para un productor en el centro de la Provincia de Buenos Aires (no zona núcleo) siguen siendo atractivos, especialmente por los altísimos rindes de producción que se vienen generando en esta campaña 2018-2019.
El cuadro anterior muestra un ejercicio de costos e ingresos hecho sobre un campo de calidad de suelo promedio a 300 kilómetros del Puerto de Rosario. Esto es importante porque el flete vuelve negativo el resultado en la medida que la distancia al puerto es mayor.
Viendo el análisis desde el punto de vista financiero (como si alguien invirtiera en un pool de siembra), muestra un altísimo retorno, cercano al 27% en un período de 6 meses. Por supuesto que este retorno contempla un gran riesgo, el climático, que se hizo presente de la peor manera en la campaña anterior, con un sequía histórica durante el período crítico de desarrollo de la planta combinado con exceso de lluvias en plena cosecha. Esto nos hace ver que los retornos de inversión de la soja, y de la agricultura en general deben ser observados a lo largo de períodos mas largos, como 10 años, donde pueden reflejarse ciclos parecidos a los promedios, con inundaciones, sequías, y años óptimos. La agricultura no es para inversores de corto plazo…