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Negocios del Campo

Retenciones al campo

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Las retenciones al campo tienen una larga historia en Argentina, especialmente asociada a los gobiernos dirigistas. Las retenciones al campo son medidas orientadas a alterar el precio de mercado; muchas veces con intenciones buenas pero desinformadas (y pobres resultados) de beneficiar a segmentos de la población mas pobre, y otras simplemente con la intención abierta de perjudicar a los productores agropecuarios. Finalmente las retenciones siempre han perjudicado a toda la población ya que terminan generando una caída de producción por falta de rentabilidad y de previsibilidad de reglas de juego.

luis basterra retenciones alberto fernandez retenciones al campo 2019
Luis Basterra jura apoyar la suba de retenciones al campo a Alberto Fernández
Qué son las retenciones al campo?

Las retenciones al campo son impuestos que el gobierno define cosméticamente como «Derechos de Exportación» con los que grava la exportación de productos del campo como soja, maíz, trigo, carne, leche, arándanos, limones, miel, manzanas, peras, entre otros.

Son constitucionales las retenciones al campo?

No. Son absolutamente anti-constitucionales por discriminatorias. Un mismo ciudadano o empresa como es un productor agropecuario, además de pagar 30% de impuesto a las ganancias (mas IVA, IIBB, Cheque, Inmobiliario, Sellos, etc, etc.) como hace cualquier escribano millonario, Marcelo Tinelli, el goleador de Boca o River o el que fabrica Manaos, paga adicionalmente 33% sobre su precio de venta. Un contratista rural de La Carlota (Córdoba) que alquila 100 hectáreas y que gana 30.000 pesos por mes arriesgando mucho capital y trabajo paga el triple de impuestos que Marcelo Tinelli por peso facturado, sólo porque a los políticos argentinos no les gusta el campo y les encanta la tele, escriturar con escribanos o cortarse el pelo en lugares caros (cuándo las retenciones para los peluqueros caros??)
Por qué ningún juez declaró inconstitucionales las retenciones? Porque la Corte Suprema es peronista y aliada en general del poder político.

Cómo funcionan las retenciones?

Cuando los exportadores (que no son los productores agropecuarios) registran la exportación, el gobierno les deduce el porcentaje de retención del importe en dólares que deberían recibir de los compradores del exterior y se lo apropia como cualquier impuesto. A su vez, los exportadores (que están muy concentrados en menos de diez grandes empresas) trasladan esta quita del precio a los productores, pagándoles aún menos por su soja, maíz o carne en el mercado local. Los precios de los cereales y oleaginosas de las bolsas de cereales de Rosario y Buenos Aires reflejan el precio disminuido en pesos que reciben los productores por las retenciones.

Cuál es el dolar que recibe el productor?

Al 26 de diciembre de 2019 la tonelada de soja Rosario cotiza 14.400 pesos (que son US$ 228 al dólar oficial/comercial, y US$ 180 al dolar real que usa el productor para comprar insumos), mientras que el precio de la soja en Chicago (el valor mundial por ser un commodity) es de US$ 344 la tonelada. Eso quiere decir que el productor de soja sólo recibe un 52% del verdadero valor de exportación de soja debido a las retenciones del campo. Esto es porque a retenciones a la soja de 30%-33% se suma el problema del cepo cambiario con un tipo de cambio mas bajo que no refleja la libre oferta/demanda. Esto quiere decir que el dolar que recibe el campo cuando vende soja es de sólo 42 pesos, mientras que para comprar insumos como semilla, fertilizante, agroquímicos y maquinaria como tractores, cosechadoras o sembradoras paga un dolar de 80 pesos.

«El campo gana mucho», por eso le aplican retenciones?

No, la gran mayoría de los productores trabaja con un margen ajustado, en un negocio de altísimo riesgo (por el clima), en el que los márgenes deberían ser altos para compensar potenciales pérdidas por sequía o inundación.

Son justas y solidarias las retenciones al campo?

No, son absolutamente discriminatorias contra el campo. El campo, además de las retenciones, paga todos los otros impuestos que paga cualquier actividad productiva en Argentina. Si no fueran discriminatorias y se quisiera subir el impuesto a quienes mas ganan (porque no quieren bajar el gasto público), deberían haber subido la tasa de impuesto a las ganancias. En ese caso, por ejemplo, un escribano o un exitoso conductor de TV pagarían junto con los productores de soja exitosos la misma tasa de ganancia, mientras que quienes ganan menos o pierden pagarían menos o no pagarían nada. Tampoco son solidarias, porque lo que se busca es perjudicar al campo argentino con mas presión impositiva para no tener que ajustar el gasto público, fundamentalmente el costo de mas de dos millones de empleados públicos innecesarios tomados por los gobiernos federal, provinciales y municipales durante 2003-2015, quienes conservan sus privilegios, así como casi 5 millones de jubilados que fueron dados de alta sin aportes durante ese mismo período. Otra gran parte del dinero de las retenciones va al pago de la deuda externa contraída por Macri para pagar el exceso de gasto público heredado que no fue capaz de ajustar.

Los que pagan las retenciones al campo son oligarcas terratenientes?

No, como demuestra el último censo agropecuario de 2019, la mayoría de la agricultura se hace sobre campos alquilados. Los que pagan las retenciones son en su mayoría productores medianos que tienen muy poca superficie propia de campo.

Cuáles son las consecuencias de las retenciones

Que productores agropecuarios pierdan dinero, o dejen de ganar, y que se siembre menos. Culpa de estas pérdidas muchos productores se ven forzados a abandonar campos y/o mal-venderlos, muchas veces a gente que hizo su dinero en «la política» (esto los que somos del interior lo sabemos, quién no conoce a un ex ministro/diputado/intendente comprando estancias con testaferros?). A mediano plazo, la baja de producción hace que el estado recaude menos dinero que sin retenciones, porque ya no hay a quien cobrarle impuesto, generando para el estado además menos recaudación de ganancias e iva porque baja la actividad.

La historia de las retenciones al campo

Las retenciones al campo no son el único instrumento que se ha usado para perjudicar a la producción agropecuaria. A eso se suman otros obstáculos perversos como los monopolios estatales de comercio exterior como el IAPI (creado por Perón como militar antes de dar el golpe de estado de 1943 y promovido a partir de su presidencia civil de 1946) y la Junta Nacional de Granos (organismo creado por los gobiernos fascistas de los 30’s e impulsado por el peronismo).

Como todo organismo público discriminatorio y poderoso, el IAPI terminó monopolizando licitaciones de importación de armamento, equipo y material militar obsoleto durante el primer gobierno peronista, marcando el inicio de la corrupción del estado peronista a gran escala. Desde trenes a tanques dados de baja en Europa y USA, el IAPI que castigaba a productores agropecuarios, pagaba sobreprecio a estas importaciones a «amigos del poder».

Otro típico instrumento de discriminación al campo han sido los tipos de cambio diferenciados donde el dólar del campo siempre ha estado muy por debajo del dolar libre. Esto ha pasado con peronistas, radicales y militares.

En los doce años peronistas del 2003-2015, además de las retenciones, se aplicaron otros mecanismos perversos como los permisos para exportar, que permitían que sólo aquellos «amigos del poder» pudieran comerciar internacionalmente.

Por otra parte, el dólar diferenciado, la prohibición de exportación y las retenciones permitían que industrias como la molinería y los frigoríficos de consumo local «cazaran en el zoológico» pagando centavos a los productores de trigo y carne respectivamente, quienes no tenían otra opción para vender su producto. En el caso de la carne, se suma la infame gestión del ONCCA, organismo creado para supervisar la industria de la carne, que terminó dando subsidios espúreos a los feed lots de los «amigos del poder», e incluso a «amigos del poder» que ni siquiera tenían un feed lot.

Retenciones a la soja

Las retenciones a la soja son relativamente nuevas en Argentina, ya que esta oleaginosa también es nueva en nuestro país. Las retenciones a la soja las implanta el ex ministro de Economía Roberto Lavagna en 2002 durante el gobierno de Eduardo Duhalde. Las retenciones a la soja fueron re-confirmadas por el gobierno de Nestor Kirchner en 2003-2007.

lavagna creador inventor de las retenciones a la soja
Lavagna inventó las retenciones a la soja en 2002 y sigue defendiendo las retenciones al campo en 2019 a través de sus legisladores

Retenciones al campo 2008

En 2008, Cristina Kirchner y su ministro de Economía Martín Lousteau lanzan la guerra total contra el campo y su gente y proponen subir las retenciones a la soja al 45%. La historia es conocida, si el campo no se hubiera rebelado en 2008, hoy las retenciones a la soja serían del 70%. Sin embargo, no fue ninguna victoria del campo argentino, a pesar de la derrota del kirchnerismo, las retenciones a la soja quedaron en 2008 y hasta 2015 en 35% del precio de venta internacional, lo que implicó falta de inversión y que zonas productivas que están lejos del puerto no pudieran producir soja porque el valor de la oleaginosa en Chicago bajó de 600 dólares a menos de 200 dólares la tonelada.

Lousteau retenciones al campo la 125 cfk
Martín Lousteau promueve la 125 junto a CFK para expropiar a productores de soja con 45% de retenciones en 2008

Retenciones al campo 2018

Al inicio del gobierno de Macri, las retenciones al campo comienzan a bajar sustancialmente. Se eliminan completamente las retenciones a los cereales como trigo y maíz, y se comprometen a bajar gradualmente las retenciones a la soja hasta eliminarlas completamente.

Como respuesta, el campo reacciona con siembras y cosechas récord de maíz y trigo, y récord de exportación de carne. La economía del sector crece tan fuerte que incluso durante 2018 en el medio de la recesión de la industria y el comercio el número del PBI inter mensual pasa a ser positivo. Se reabren muchos frigoríficos cerrados por el kirchnerismo con miles de empleos recuperados.

En 2018, cuando el gobierno de Macri comienza a afrontar una fuerte crisis financiera (devaluación, inflación) fruto de mala gestión, sequía histórica y condiciones financieras internacionales, las retenciones a la soja estaban en el orden del 18% y bajando. Urgido de dar señales al mercado que se iba a cumplir con la meta de déficit cero en 2019, Macri pone una retención extraordinaria extra de 4 pesos por cada dolar exportado, lo que significaba en ese momento un 5-6% adicional de retenciones. La mayoría de la dirigencia agropecuaria terminó aceptando esa retención adicional por dos razones: 1)con una inflación de mas 30% anual ese importe fijo significaba que la retención adicional prácticamente desaparecía al tercer año y 2)lo veían como un aporte patriótico para evitar el mal mayor que era el regreso del peronismo con odio recargado al campo.

Claramente algo salió mal, nuevamente Argentina tiene un gobierno que sólo ve al campo como fuente de dinero para sostener poder político, fortunas espúreas, ñoquis y mantenidos. Si el campo no reacciona, pronto serán otros los propietarios y arrendatarios de los campos…