La sequía está afectando las perspectivas de los campos naturales de recría
La seca que nos está trayendo este clima Niña débil ya está afectando los números de los campos con explotación ganadera. La escalada del precio del ternero de invernada totalmente inusual que presenciamos durante la última zafra ganadera, alimentada por la incertidumbre económica y la devaluación esperada del peso, parece estarse moderando o revirtiendo parcialmente por un factor climático, va a haber menos pasto disponible para retener terneros en el campo.
Esta tendencia levemente negativa en el precio de la invernada lleva unas dos semanas. Si bien los pronósticos del clima están informando que puede haber lluvias ahora durante el comienzo de la primavera, va a faltar agua en Octubre, e incluso algunos meteorólogos predicen que la Niña impactará de forma plena durante el verano. Según el climatólogo Eduardo Mario Sierra, a partir de 2009 entramos en un largo período de 70 años de condiciones mas secas, es decir adversas para las producciones del campo, especialmente para la agricultura, y habrá que acostumbrarse a los nuevos regímenes de lluvia. Esto también podría traer una reversión en el proceso de avance de la agricultura sobre la ganadería, ya que cultivar en zonas más secas tendrá mucho mayor riesgo que una explotación ganadera donde se pueda manejar la carga animal.
Por la sequía que se pronostica esta podría ser la segunda temporada consecutiva de un servicio inferior al año anterior. Luego del destete extraordinario del 2018 vino el del 2019 muy inferior (también por el retraso de las lluvias) y el del 2020 parece estarse complicando también. Estamos a menos de dos meses del comienzo del entore en los principales campos ganaderos y claramente falta agua, por lo tanto falta pasto y desmejora el estado corporal de vacas y vaquillonas que van a recibir servicio. Si ni llueve pronto, la zafra de terneros de 2022 puede ser inferior (recordemos que si damos servicio en Noviembre-Diciembre 2020, la parición es en Agosto-Septiembre de 2021, y el destete de estos terneros se hará a partir de Febrero – Marzo 2022), es un período de quince meses que atraviesa tres años calendario.
Este proceso de menos pasto y venta de invernada o recría por falta de pasto podría moderarse con las lluvias pronosticadas para el resto de septiembre, sin embargo el desafío de la seca se va a dar a partir de Octubre. El escenario mas predecible es que por la falta de pasto, y la fuerte suba del precio del maíz hagan que la ecuación de invernar o engordar a corral no se vea atractiva.
La rentabilidad del feedlot y el negocio de invernar pueden cambiar también por la sequía
La producción del feedlot empezó a disminuir porque de hecho los feedlots están reponiendo menos de lo que venden. Por esto el hueco de producción de carne estacional que se da todos los años se podría profundizar este año.
No sólo el gran feedlotero está sufriendo. Productores ganaderos que tienen en su campo lotes con campo natural para recría y pequeños corrales de engorde están revirtiendo la decisión que tomaron hace un par de meses de retener parte de la zafra de terneros para recriar y los están vendiendo antes de lo previsto. Esta tendencia se va a profundizar en la medida que siga sin llover.
El precio de los terneros recriados todavía es atractivo para quienes tuvieron que cambiar de idea en el medio de invierno y deshacerse de sus lotes. Ninguno quiere quedar atrapado en una sequía con alto precio del maíz, sin pasto y el riesgo que se disparen los precios de los rollos.
El estado de los campos naturales, donde se hace la mayoría recría de Argentina en la Provincia de Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fé, Córdoba y La Pampa puede seguir deteriorándose si no llueve ahora durante la primavera, que es cuando se produce el mayor crecimiento de pasto. Si falta agua, las gramíneas que que constituyen el principal forraje sufren mucho y se encañan, disminuyendo su calidad y especialmente su digestibilidad.
Se viene una reducción del stock bovino argentino?
Por las mediciones de stock bovino que se hacen en Argentina en cada campaña de vacunación obligatoria por el SENASA estamos viendo una reducción. Si bien las campañas de vacunación cambiaron la metodología, incluso comparando campañas similares da un menor stock.
El stock a diciembre 2019 había dado 100.000 terneros mas que el año anterior, pero la medición de otoño 2020 ya dio una reducción de 200.000 respecto del año anterior y también se observa una caída del dos y medio por ciento en la cantidad de vacas, tomando en cuenta las nueve provincias principales que vacunaron obligatoriamente.
El buen precio de la vaca china impulsó desde 2019 una liquidación de vacas improductivas, pero también se faeno un alto porcentaje de hembras preñadas.
A esto se suma que esperamos una serie de zafras de terneros no tan buenas como la actual. En lugar de la producción de 15 millones de terneros, esperamos 300.000 a 400.000 cabezas menos.
Esto se puede corregir si mejora un poco el clima, o con una mayor tasa de extracción, es decir produciendo mas carne con la misma cantidad de stock. Para esto hace falta que se faenen animales mas grandes.
Por la mayor participación del novillo en los últimos meses de faena, el peso medio de la media res creció de 225 a casi 230 kilos. Pero todavía estamos matando animales muy chicos. Nuestros vecinos de Uruguay y Brasil tienen carcasas de 250 kilos, Australia 300 y Estados Unidos más de 360 kilos.