En el marco del inicio de la renegociación de la deuda con el FMI y los acreedores privados del exterior, el gobierno peronista de Alberto Fernández ya eligió su víctima y método: mas retenciones al campo.
Luego de conseguir con la mayoría peronista y sus aliados la aprobación de la llamada Ley de Solaridad, que transfiere recursos del sector productivo al sector improductivo del país, es probable que el presidente peronista Alberto Fernández use las facultades aprobadas por el Congreso dominado por el peronismo para incrementar aún mas las retenciones al campo.
Retenciones a la soja
Las retenciones a la soja, que habían bajado a un 24% en el último año de la era Macri (a pesar de impuesto fijo de 4 pesos por dolar implementado en 2018), es probable que pasen del actual 30% al 33%.
Este nivel de retenciones a la soja ya había sacado del juego a productores que están a mas de 500 km del puerto, porque con ese costo impositivo, el negocio de siembra de soja sobre campo alquilado ya no tiene sentido. Mientras tanto, a este nivel de 33% de retenciones es probable que también saque para la campaña 2020-2021 a los productores que siembran soja sobre campo propio. El poroto de soja (soja en grano) y sus subproductos (aceite de soja, harina de soja) son la principal fuente de recaudación de las retenciones al campo. Con un volumen de cosecha parecido al del maíz, la soja vale el doble que el maíz en el mercado transparente de Chicago.
Mientras que la soja cotiza en el rango de 330-340 dolares la tonelada, el maíz lo hace en el entorno de 150-160 dólares la tonelada.
Retenciones al maíz
De acuerdo a las últimos trascendidos, el maíz, que el gobierno peronista de Alberto Fernández castigó con un 15% de retenciones, quedaría en un nivel similar.
Retenciones al trigo
El trigo, cuyo precio últimamente está firme en el entorno de 180-190 dólares podría verse compensado con una leve baja de retenciones, respecto de la última suba que implementó el gobierno peronista de Aníbal Fernández.
El gobierno de Macri dejó al trigo con unas retenciones creadas en la emergencia de 2018 es una suma fija de 4 pesos por dólar, que a final de su mandato eran aproximadamente un 6-7% según el tipo de cambio, que rápidamente perdían proporción sobre la venta debido a la combinación inflación/devaluación, para disminuir con el paso del tiempo el peso de este impuesto distorsivo.
El gobierno de Aníbal Fernández subió en su primer mes de gestión las retenciones al trigo al 15%, y ahora estaría evaluando volver a un nivel del 9%, lo que aún hace que los márgenes del trigo estén muy complicados. Hoy existe un mercado internacional que está pagando el trigo un precio en dólares en Chicago que no es probable que se sostenga. Si el trigo vuelve a bajar de 190 dólares a 150 las retenciones al trigo harán que mucha gente en zonas del Sudoeste y Sudeste de Buenos Aires dejen de sembrar. Y estos son campos en los que no se puede sembrar soja de una manera rentable.